George McLaurin, el primer hombre negro admitido en la Universidad de Oklahoma en 1948, se vio obligado a sentarse en una esquina lejos de sus compañeros blancos.

 

 

RETO SEMANAL 4 ¿QUÉ PUEDO HACER YO?

Para realizar este reto semanal, me he decantado por la opción 1, en la que haciendo una reflexión en torno a los que podemos hacer cada uno en nuestro ámbito como empleado público para impulsar la igualdad de trato y no discriminación.

 

Desde que comencé a trabajar en la Universidad me he preocupado mucho de la formación y de la actualización permanente de mis conocimientos, considero que es un factor esencial para todos los empleados públicos. He estado siempre dispuesta a la realización de formación adicional tanto de los cursos que ha estado disponible en mi propia Universidad, como cursos externos, incluso decidí estudiar el Grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos durante los años 2010-2014 para una ampliación de conocimientos, para aplicarlos en mi gestión laboral diaria.

 

Pero también debo decir que no ha sido fácil debido a lo complicado que es compaginar la vida laboral con la familiar y con los estudios. Días en los que salía de trabajar, me comía un bocadillo y me metía en clase y todo ello con una familia que atender (compras, comida, casa, médicos, etc…) y unos hijos en edad escolar.

 

Para mí ha sido muy importante haber descubierto mi vocación por el derecho y defensa de los trabajadores, que se ha fomentado a lo largo de los años cuando entré a formar parte de una organización sindical.

 

Actualmente estoy, negociando en las mesas de negociación de mí Universidad y participando de acuerdo con lo que establece la Ley Orgánica de Libertad Sindical, el EBEP y demás normativa aplicable por la defensa de los derechos de los trabajadores, por eso para mí es importante en estos momentos que los acuerdos y reglamentos que negociamos tengan una visión global que evite desigualdades de trato y que limiten y reduzca la discriminación. También considero que debemos promover un lenguaje inclusivo y no sexista en los acuerdos y reglamentos. Vigilar las convocatorias y las ofertas de empleo para evitar cualquier discriminación y garantizar la igualdad real.

 

Es evidente, que las principales medidas para impulsar la igualdad de trato y no discriminación, deben de partir de los poderes públicos, ya sean a través de normas legislativas o ayudas económicas. Pero todos desde nuestra posición debemos poner en marcha de manera urgente, todas las herramientas que tengamos disponibles para llevar a cabo nuestra labor evitando las situaciones de indefensión y discriminación que hoy en día se sufren.